España ha experimentado desde los años 60 un desarrollo sin precedentes, que le ha permitido alcanzar un nivel de convergencia económica y social muy alto con la Unión Europea. En paralelo, y de manera similar a lo que ha ocurrido en otros países europeos, el peso del Estado en la vida y economía de los ciudadanos ha ido aumentando lenta pero inexorablemente. El Estado del Bienestar parece garantizar estabilidad, tranquilidad y progreso. Los sistemas democráticos, y los gobiernos y partidos que se presentan para la reelección cada cuatro años, venden como “derechos” otorgados por ellos a los ciudadanos privilegios o prebendas generados mediante el dinero extraído previamente a los mismos. Se prometen y ejecutan infraestructuras maravillosas, se aumentan las pensiones, se extienden subsidios y subvenciones. A cambio se suben impuestos y se endeuda a las generaciones futuras.
Algunos españoles, entre los que me incluyo, hace años que presenciamos este incremento de la presencia del Estado en nuestras vidas con preocupación. La profunda crisis que asola España desde 2008, y el hecho evidente de que el Estado busca autoprotegerse sin reducir su tamaño , como demuestra el mantenimiento del déficit publico pese al salvaje aumento de impuestos, han incrementado exponencialmente el numero de ciudadanos desencantados con esa situación. Bastante heterogéneos, mayoritariamente votantes de partidos de centro derecha, e irritados profundamente con el PP, que ha llevado hasta limites muy superiores a los que jamas lo hizo el PSOE tanto la presión fiscal como el intervencionismo del Estado en todos los ordenes de la vida, buscan (buscamos) algún partido político que desee impulsar la recuperación del individuo frente al poder estatal, y que haga frente al poder de la “casta” de los partidos mayoritarios. El abanico de posibilidades abarca desde la UPyD de Rosa Diez a los Ciudadanos de Albert Rivera, pasando por la casi fallecida iniciativa de Mario Conde, la reciente formación encabezada por Santi Abascal y Ortega Lara, o la esperanza de que Aguirre rompa amarras con el PP y decida emprender proyecto por su cuenta. Casi todas tienen un atractivo en común: la critica a la casta PP-PSOE. Todas buscan pescar votos en las aguas revueltas de los frustrados votantes de esos partidos.
A mediados de 2009 se fundo en Madrid el Partido de la Libertad Individual, P-LIB, presidido desde entonces por Juan Pina, antiguo militante del Centro Democrático y Social de Adolfo Suarez, donde ingreso en 1988 y permaneció mas de una década. En la actualidad cuenta con mas de un millar de afiliados, intelectual y políticamente muy activos en las redes sociales.
Cercano ideológicamente a los partidos libertarios europeos y americanos, y económicamente defensor de la Escuela Austriaca, el P-LIB defiende la soberanía del individuo y es contrario al estatismo. Aboga por una drástica reducción de las competencias de las administraciones públicas y su traslado a la sociedad civil o la “devolución al ciudadano del poder para tomar sus propias decisiones con la mínima (o idealmente ninguna) injerencia del Estado”. Ademas, y por disposición estatutaria, no acepta subvenciones públicas y se financia exclusivamente con aportaciones voluntarias (donaciones, cuotas de los afiliados, etc.).
Pese al atractivo que estos principios deberían tener entre los votantes huérfanos entre los que me encuentro, la realidad es que el P-LIB navega sin pena ni gloria y es desconocido por la practica totalidad de sus posibles “clientes”. No solo eso. En los últimos días, y tras la airada respuesta del Juan Pina a la aparición de VOX, algunos que se consideran (nos consideramos) cercanos a las posturas liberales, asistimos entre el estupor y el desencanto a como el partido que debería aglutinarnos a todos en su seno, parece empeñado en marcar distancias con todo aquel que no tenga una identidad ideológica total con sus postulados.
Tengo 43 años. He vivido en varios puntos de nuestra geografía, en Londres, y resido actualmente en Estados Unidos. Ingeniero superior, trabajo desde hace casi 20 años en diversas empresas, varias de ellas multinacionales, donde he ocupado y ocupo posiciones de responsabilidad directiva. He presenciado, participado y dirigido éxitos y fracasos en distintos negocios. He visto triunfar proyectos con pocas oportunidades aparentes, y derrumbarse otros que parecían muy prometedores. En mi experiencia, quizás el factor mas importante que determina el triunfo o el fracaso de las organizaciones es la definición estratégica de sus objetivos prioritarios, y la aceptación de que no se puede conseguir todo, ni todo a la vez. Dicha estrategia pasa siempre por un análisis cuidadoso y detallado del mercado, de los competidores, y de las fortalezas/debilidades de la oferta del producto o servicio a comercializar. Una vez analizado, se procede a la definición de metas, y de las tácticas y medios para hacer llegar a los potenciales clientes/consumidores el producto/servicio ofertado
Partido de la Libertad
Creo que el fracaso actual del P-LIB se debe, fundamentalmente, a que aun no ha decidido que papel quiere jugar en la sociedad. Cual es su objetivo estratégico? quiere ser una fuerza mayoritaria? Quiere tener representación democrática para influir en los partidos mayoritarios? quiere ser una referencia moral, un think tank cuyo pensamiento y forma de entender las relaciones entre los individuos y el Estado en la sociedad influya en el mayor numero posible de ciudadanos? Quiere ser un club selecto de libertarios anarcocapitalistas ?
Las tácticas a aplicar en cada caso deben ser distintas, y los medios de trasladar el mensaje al potencial votante también
Asumiendo que tienen claro que, al menos durante las próximas décadas (y creo que nunca), un partido marcadamente liberal no puede ser una fuerza mayoritaria, apostaría a que la mayor parte de los afiliados al P-LIB se alinearían con cualquiera de las dos afirmaciones siguientes: influir en la sociedad vía obtención de representación parlamentaria y por lo tanto condicionando a los gobiernos resultantes o al menos haciendo escuchar su voz en los parlamentos correspondientes, o ser un think tank con objeto de ampliar el numero de españoles que consideren que el Estado, mas que la solución, es el problema. Paso a continuación a realizar un ejercicio acelerado de lo comentado
MERCADO
España es un país cuyo ciudadano medio es de ideología marcadamente socialdemócrata. Consume información procedente de mass media, lee poco o nada, y esta en general bastante satisfecho con el Estado de Bienestar. Sin embargo, hay un numero importante de votantes en los que en los últimos años ha ido calando la idea de que el Estado no es necesariamente bueno, y que devolver la iniciativa (y el dinero vía reducción de impuestos) al ciudadano es positivo. De que las subvenciones son fundamentalmente una mala iniciativa y que abre la puerta a la corrupción generalizada. Y que el Estado del Bienestar tal y como lo conocemos hoy es, en el mejor de los casos, insostenible en pocos años. Dos figuras han contribuido de manera decisiva a este cambio de mentalidad en ese sector de la población: Federico Jimenez Losantos al frente del proyecto de LibertadDigital, y Esperanza Aguirre, ex Presidenta de la Comunidad de Madrid. En mi opinión, a efectos de este ejemplo, y si el P-LIB quiere atraer votantes a su proyecto político, el caladero, su mercado potencial, es precisamente ese.
COMPETIDORES
UPyD: Partido muy personalista, de carácter marcadamente socialdemócrata. En principio no debería atraer al mercado potencial del P-LIB sino a desencantados del PSOE. Sin embargo, también tiene un mensaje fuertemente antinacionalista, de defensa de las libertades en algunos territorios autonómicos, y de regeneración democrática, y su líder posee una excelente relación con Federico Jimenez Losantos, lo que le otorga cierta relevancia mediática que le es negada en los medios mayoritarios controlados por PP y PSOE pese a su ya importante presencia parlamentaria.
Ciudadanos: Algo parecido al anterior, con bastante menos implantación a nivel nacional de momento. Tiene el atractivo de la autentica frescura, pues su líder, a diferencia de Rosa Diez, nunca ha pertenecido al establishment politico
VOX: Escisión del PP, al que critica con virulencia su excesiva cesión ante los nacionalistas y su rendición ante ETA. Ademas parece apuntar a políticas liberalizadoras en lo económico, con menciones mas o menos claras a reducciones de impuestos.
Cual es la oferta del P-LIB, su producto? Su programa electoral. Dirigido a su mercado potencial, y en relación a sus potenciales votantes:
FORTALEZAS
Reduccion de impuestos, sistema de pensiones mas sostenible, eliminación de subsidios y subvenciones, separación de poderes
DEBILIDADES/AMENAZAS
Federalismo
Posturas respecto al aborto/drogas/armas
Estrategicamente, según ese análisis, y siempre en mi opinión, el mensaje debería:
1. Centrarse en aspectos económicos, con proyectos de cambio sobre la situación actual bien trabajados (por ejemplo, pensiones).
2. Explicar muy bien la idea federal que defiende (me temo que al votante potencial le puede dar cierta alergia).
3. Incluir respuestas firmes pero respetuosas para el discrepante respecto a temas como eutanasia, aborto o drogas, evitando dogmatismos y reconociendo la complejidad del problema.
4. Y, por supuesto, debería eludir determinados debates de forma evidente (de verdad alguien cree que la no legalidad de la tenencia de armas es un problema en este país? quieren asustar a los pocos que escuchan sus mensajes?)
Una vez definida la estrategia (que mensaje y a que consumidor potencial va dirigido), debe definirse el plan de medios con el que llegar a esos consumidores. Y, lamentablemente, la única forma de hacerlo en este país, es con medios de masas (Radio y TV). Y aquí es donde comienza el verdadero drama del P-LIB. Son el único partido que es absolutamente irrelevante mediaticamente. Si es por elección, es poco inteligente. Si es por incapacidad, debe buscar las causas raíz y corregirlas.
Si eso implica fichar una figura mediática, que lo transforme en su prioridad numero 1. Si implica hacer lobby hasta conseguir presencia relevante en alguna radio o televisión, que lo hagan. Si siguen como hasta hoy, jamas llegaran a nada.
Les guste o no, ha hecho mas Esperanza Aguirre, cuya ejecutoria como liberal es cuando menos discutible, por llevar el mensaje antiestatista al ciudadano medio, que todos los militantes del P-LIB. El propio Daniel Lacalle ha conseguido mas en unos meses que el P-LIB en sus 5 años de historia. Por cierto, Daniel Lacalle, al que supongo nadie cuestionara su liberalismo, llevo a Esperanza Aguirre, la “bicha” de los actuales dirigentes del P-LIB y de muchos liberales, a la presentación de su libro; por que? porque ayudaba a su estrategia, a hacer llegar su producto al consumidor potencial; y que yo sepa, Daniel no ha tenido que renunciar a sus principios en absoluto, ni el contenido de su libro es menos liberal.
No he pretendido ni pretendo decirle al P-LIB cual debe ser su estrategia. Lo que si espero que entiendan es que deben tener una. Lo anterior es únicamente un ejemplo rápido e impreciso de como enfocaría yo la situación, centrándome en lo que YO creo que es el potencial votante del P-LIB. Si el P-LIB cree que sus votantes potenciales son ultraizquierdistas, socialistas, o todo el espectro, la estrategia debe ser distinta.
Por ultimo, creo que una sociedad adormecida por el mensaje estatalista durante casi un siglo no pasa de la socialdemocracia al anarcocapitalismo de la noche a la mañana. Y que, por tanto, adoptar posturas maximalistas, marcando diferencias contra todo el que discrepe lo mas mínimo del mensaje oficial libertario del partido (es muy llamativo como dedican varias paginas del manifiesto a diferenciarse de otros partidos, incluido IU), sacando a relucir extravagancias como la legalización de las armas, y dedicando las diatribas mas agresivas a aquellas figuras o movimientos que pueden resultar referentes morales para muchos potenciales votantes, como Esperanza Aguirre o VOX, es un error garrafal desde el punto de vista estratégico. Ver la cantidad de personas intelectualmente inquietas que se consideran cercanas al liberalismo que estos días han mostrado indiferencia, alejamiento, o hasta antipatía por el P-LIB debería hacer reflexionar, y mucho, a los actuales dirigentes.
No he dedicado varias horas de mi tiempo para otra cosa que no sea intentar ayudar al que todavía pienso tiene la oportunidad de ser el partido que aglutine a los que nos sentimos, en mayor o menor grado, liberales. Pido disculpas si alguien se siente ofendido, particularmente mi amigo y editor de este extraordinario blog, que me acerco a un mundo, el del liberalismo, casi totalmente desconocido para mi hace 5 años.
PD: En el test de afinidad del P-LIB doy 873, y en el de Nolan aparezco como marcadamente liberal. Que, por otra parte, es como me siento.
PD2: Pido disculpas por las faltas de ortografía; mi teclado es americano, y el traductor no me deja poner todas las tildes que son necesarias
PD3: Según los objetivos estratégicos, a veces es bueno establecer alianzas con competidores. Tampoco vendría mal dejarse auxiliar por profesionales del marketing. Tonterías aparentes como el nombre del partido o el color y forma del logotipo influyen de manera decisiva en los votantes. Partidos que empezaron de cero como UPyD lo saben. O alguien cree que la elección del color magenta es casual? Seria el P-LIB menos liberal si prestara atención a esos detalles? Al contrario, a algunos nos empezaría a convencer de que se toman en serio su acción politica